Washington, D.C. – En un movimiento polémico, la Cámara de Representantes liderada por los republicanos votará el miércoles sobre si declara en desacato al Congreso al Fiscal General Merrick Garland. La votación se centra en la negativa de Garland a proporcionar audiotapes de la entrevista del presidente Biden con un fiscal especial. Esta escalada sigue a una investigación criminal federal que concluyó sin cargos contra Biden por manejo indebido de información clasificada.
El fiscal especial Robert Hur, quien dirigió la investigación, señaló que la decisión de no presentar cargos fue influida por la probabilidad de que un jurado pudiera ver al presidente Biden como un "hombre anciano simpático y bien intencionado con mala memoria."
Los Republicanos Empujan la Votación de Desacato
Los esfuerzos para asegurar los votos necesarios para la resolución de desacato se han intensificado, con los principales líderes republicanos trabajando incansablemente para asegurar su aprobación en una Cámara dividida estrechamente. Si tiene éxito, Garland se uniría a un selecto grupo de fiscales generales reprendidos por desafiar citaciones congresionales. A pesar de esto, es poco probable que haya más procedimientos legales debido a que el presidente Biden ha invocado el privilegio ejecutivo sobre las cintas, protegiendo efectivamente a Garland de consultas adicionales.
El presidente del Comité Judicial de la Cámara, Jim Jordan (R-Ohio), expresó su confianza en el éxito de la votación, afirmando que los miembros republicanos han mostrado un fuerte apoyo a la medida. Jordan, quien ha sido criticado por su propia negativa a cooperar con investigaciones congresionales en el pasado, distinguió sus acciones de las de Garland. Enfatizó que Garland no ha entablado negociaciones sobre los audiotapes, haciendo diferente este caso en su opinión.
Oposición Demócrata y Posición del DOJ
Los líderes demócratas y el Departamento de Justicia han rechazado la premisa de los procedimientos por desacato. Garland ha destacado la extensa cooperación ya proporcionada, incluidas cinco horas de testimonio congresional del fiscal especial Hur y la entrega de transcripciones escritas de las entrevistas de Biden.
En un reciente artículo de opinión, Garland criticó los procedimientos por desacato como ataques motivados políticamente contra el Departamento de Justicia y sus empleados de carrera. Subrayó la naturaleza destructiva de utilizar teorías de conspiración y falsedades para beneficios políticos.
El representante Jerry Nadler (D-N.Y.), el principal demócrata en el Comité Judicial de la Cámara, condenó la medida de desacato, argumentando que sirve más para apaciguar a la base del GOP que para abordar desacuerdos genuinos de políticas con el DOJ. Nadler advirtió que los audiotapes podrían ser manipulados con fines políticos si se liberan.
Implicaciones para Biden y Esfuerzos Legislativos
Los republicanos de la Cámara, liderados por el presidente del Comité de Supervisión James Comer (R-Ky.), argumentan que obtener las cintas es crucial para avanzar una investigación de destitución contra Biden que ha estado estancada y para considerar nueva legislación para proteger materiales clasificados. También aseguran que las cintas son esenciales para evaluar la capacidad mental de Biden, un punto clave en su estrategia de campaña para las elecciones presidenciales de 2024.
La invocación del privilegio ejecutivo por parte del presidente Biden no solo protege a Garland de cargos criminales por desacato, sino que también impide que las cintas se conviertan en una herramienta en la publicidad relacionada con la campaña electoral.
Expertos legales y politólogos, como Mark Rozell de la Universidad George Mason, reconocen el potencial daño político si las cintas se liberan, señalando cómo podrían ser editadas para perjudicar la imagen pública de Biden.
Batallas Legales en Curso por la Transparencia
Varias organizaciones de medios y la Fundación Heritage están buscando acceso a las cintas a través de la Ley de Libertad de Información. Sin embargo, no está claro si estos esfuerzos darán frutos antes de las próximas elecciones.
El informe del fiscal especial Robert Hur sobre la investigación del manejo de documentos clasificados por parte de Biden, que se llevó a cabo durante más de un año, confirmó que no se presentarían cargos criminales. Sin embargo, el informe registró evidencia de que Biden retuvo y divulgó materiales clasificados después de su vicepresidencia mientras era un ciudadano privado.
El resultado de esta votación por desacato y las batallas legales más amplias subrayan las crecientes tensiones partidistas en Washington, con implicaciones significativas para el panorama político de cara a las elecciones presidenciales de 2024.
Comments